Psic. Adriana Rosales

Todo lo que empieza, va teniendo un final. Y no es precisamente ese final del día en que dos personas se despiden. Todo, después de la cima, desciende. Es una ley. Y eso si funciona así. 
Cuando uno de los dos no quiere, esta la parte que se atribuye toda la responsabilidad, todo la carga, todas las emociones. Pero es inútil querer salvar solo, algo que es de dos. Cansa, agota las energías y en ocasiones, destruye. 
Si entiendes que el amor se escribe y se construye a base de los momentos con alguien, y con suerte también entiendes que esos momentos no tienen la obligación de ser eternos pero si únicos; vas a salir bien de muchas situaciones porque automáticamente vas a entender cuando se termina, y que si no depende de ti, y que si no fuiste tu quien marco el final pues es donde entra el significado de palabra respeto, tanto contigo como con el otro.

Psic. Adriana Rosales Castillejos